Ivo García Álvarez

Las Médulas

Introducción

Las Médulas son los restos de la más grande explotación romana de oro de todo el noroeste peninsular, hoy declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Realmente Las Médulas no fue más que una explotación minera a cielo abierto con grandes, me atrevería a decir inmensos para aquellos tiempos, movimientos de tierra que, debido a la geología del terreno, a los métodos de laboreo empleados y a los dosmil años transcurridos desde que se efectuó la explotación, ha dado lugar a un área de muy alto valor paisajístico e histórico, a los que se puede añadir el etnográfico. Se encuentra en el municipio de Carucedo.   Aproximación.               El itinerario parte del pueblo de Las médulas, en el centro de la explotación. Para llegar saldremos de la A 6 en Villamartín, en donde nos desviaremos por la N-120 en dirección a Monforte de Lemos y Orense. A poco de cruzar el Río Sil, en La Barosa, nos desviaremos hacia Carucedo y Las Médulas. Después de bordear el hermoso lago de Carucedo nos encontraremos la antigua carretera que unía Ponferrada y Orense que hemos de tomar en dirección a Ponferrada, nuestra izquierda. Enseguida entraremos en Carucedo, que hemos de atravesar, y casi al final, medio escondido, encontraremos hacia nuestra derecha el desvío que nos conducirá a Las Médulas. Aparcaremos a la entrada del pueblo al lado del Aula Arqueológica, de reciente construcción, que quizá merezca una visita, ya que nos permitirá obtener una idea general del conjunto que vamos a visitar.             Existe otro itinerario de acceso que se puede seguir saliendo de la A 6 en el acceso norte a Ponferrada para tomar la Nacional VI y seguirla sin entrar en la ciudad. Poco después del último desvío hacia Ponferrada encontraremos, hacia la izquierda, un desvío señalizado Puente de Domingo Flórez y Orense, por la N-536 que debemos tomar. Siguiendo esta carretera, que discurre por un verdadero mirador del Bierzo y luego bajo el Castillo de Cornatel, llegaremos a Carucedo donde, en la misma entrada, encontraremos el desvío, hacia la izquierda, que antes hemos indicado. Se tarda un poco más en el recorrido, pero es un recorrido interesante, por ejemplo, para el regreso, que además nos permitirá visitar las ruinas de Cornatel.

Ruta

Itinerario.               Desde el aparcamiento, al lado del Aula Arqueológica, seguiremos la carretera que entra en el pueblo. Justo enfrente de la fuente cubierta, abandonaremos la carretera por un antiguo camino carretal que sale hacia la izquierda por entre tierras de labor y enseguida penetra entre los picachos arcillosos.             El camino se desvanece y nos encontramos en un senderillo que, en descenso, nos llevará a “La Encantada”, señalada con “1” en el croquis, restos de una mina.             Continuando el sendero llegaremos a “La Covona”, restos de otra mina. El sendero se hace otra vez camino y continuaremos por él hasta la carretera. Al principio de ella tomaremos un senderillo que sale hacia la izquierda, nos llevará por algunos rincones agradables y nos volverá a la carretera por la que seguiremos hacia la izquierda.             Al llegar a “La Fuente de la Tía Viviana”, un amplio aparcamiento con una fuentecita de escaso caudal, abandonaremos la carretera por el sendero, que en fuerte pendiente, sale hacia la izquierda. Por él subiremos hasta la parte alta de la explotación y encontraremos una pista en la que, unos 500 m a la izquierda, hay un mirador de toda la cuenca señalado en el croquis como “2”.             Volviendo sobre nuestros pasos y siguiendo la pista pasaremos al lado de canales, recién excavados, y llegaremos a “Campo la Braña” donde hay merendero y, a veces, agua. Continuaremos por el camino que, hacia la derecha, inicia pronto el descenso. Pasaremos al lado de “Las Medulillas de Yeres”, señaladas en el croquis como “3”,  que podemos visitar con un corto desvío.             Pasaremos por otro mirador de la parte baja de la explotación y llegaremos a la pista que une Las Médulas con Yeres que tomaremos hacia la derecha. Pronto sale hacia la izquierda, casi hacia atrás, un caminillo que seguiremos hasta el lomo e iniciaremos el descenso, a nuestra derecha, por un senderillo que desciende lomo abajo, hasta encontrar, ya cerca del valle, otro camino, que viene de La Balouta y que, siguiéndolo hacia la izquierda, nos lleva enseguida hasta “La Palombeira”, señalado como “4”, que constituye la boca de un desagüe de la explotación.             Hemos de regresar sobre nuestros pasos y continuar por el camino hasta La Balouta y seguir, en fuerte ascenso, siempre por el camino de la derecha. Encontraremos otra pista que cruza. Podemos seguir al frente para visitar el “Lago Sumido”, “5” en el croquis, e incluso más adelante para observar la planicie de los estériles de la explotación.             Siguiendo la pista a la derecha regresaremos a Las Médulas y al coche. Habremos empleado cerca de 5 horas.   Otros itinerarios.               Es posible, naturalmente, repartir el itinerario descrito en tantos tramos como permita la imaginación y el deseo del caminante: A modo de ejemplo podemos visitar “La Encantada” y “La Cuevona” y regresar por la carretera a Las Médulas en algo menos de hora y media. Luego subir en el coche hasta el mirador por Orellán.             La visita a “La Encantada”, “La Cuevona” y “El Mirador” se puede hacer en alrededor de tres horas.             La visita al “Lago Sumido” se puede hacer en algo menos de una hora ida y vuelta por el mismo camino.             La visita al “Lago Sumido” y la cueva de “la Palombeira” se puede hacer en algo menos de tres horas ida y vuelta por el mismo camino.

Observaciones

Paisaje.               Desde el mirador una extensión de picachos y cárcavas rojizos, rellenos del verde del follaje. En el recorrido interior extrañas y agresivas perspectivas junto con rincones de agradable belleza.   Fauna.               Además de la que podríamos considerar normal en cualquier recorrido hay que destacar la presencia de anátidas, azulones y otros, en el lago Sumido y en otras charcas de las inmediaciones, además de las abundantísimas ranas. Aseguran que también hay unas pequeñas tortugas.   Flora.               Muy abundantes los castaños que, silvestres, tapizan los pies de algunas paredes y, cultivados  presentan gran tamaño y curiosas formas. Hay madroños, encinas y verdaderas extensiones de gabanzos.             Pero la gran atracción es la vegetación del lago Sumido en donde abundan los nenúfares, siendo el único lugar de la provincia de León en donde aparecen.   Riesgos.               No debería haber ningún riesgo en el recorrido si no se acerca uno en exceso a los taludes. Debe tenerse cuidado, si se camina entre hierbas o por las pedrizas,  con las víboras, muy abundantes.   Mapas.               Mapa nº 191 del Instituto Geográfico Nacional a escala 1:50.000 o mapa nº 191-I del mismo Instituto a escala 1:25.000 o mapa de Las Médulas de Alberto Alfonso Gómez a escala 1:15.000.